¿Por qué un nuevo himno enfermero?

¿Qué razones le llevan a uno sentarse a escribir un himno?, me preguntaban hace unos días. Pues en mi caso la respuesta es el azar, porque hacer un himno no estaba, ni por asomo, entre mis planes. Eso sí, ¡bendito proyecto! porque me ha dado grandes alegrías, ha supuesto la oportunidad de trabajar con magníficos músicos e intérpretes y, lo mejor de todo, he podido ver cómo una cancioncita se convertía en algo espectacular que llevaré en el corazón toda la vida.

Todo surgió en el mes de marzo en las reuniones maratonianas que celebrábamos quienes participábamos en la organización del Congreso Internacional del CIE. Fue allí cuando el presidente del Consejo General de Enfermería, Máximo González Jurado, planteó la posibilidad de buscar un nuevo himno de la profesión y estrenarlo en el Congreso. Hubo algunas propuestas pero ninguna de ellas terminó de encajar en el proyecto, y ante la vorágine de trabajo que arrastra un Congreso de 10.000 personas, el proyecto amenazaba con no salir adelante. Fue entonces cuando, de algún manera, sentí la responsabilidad de intentarlo.

Hay dos razones por las que me tiré a la piscina de forma tan imprudente. La primera es que llevo 14 años trabajando para la enfermería y su organización colegial, y después de tanto tiempo me siento casi como si fuera parte de esta profesión, porque he escrito cientos de historias y testimonios, miles de páginas, he vivido sus triunfos, sus penas, sus alegrías… La segunda razón es que no era ajeno a la música, tenía cierta experiencia componiendo y escribiendo canciones, muy amateur eso sí. Poca gente lo sabe pero en los años 90, Carlos Prida y yo fundamos un grupo que se llamaba Los Pat Moritas y llegamos a editar un CD. Carlos es coautor del himno y ha conseguido vivir de la música, toda una epopeya a día de hoy, así toca en varios grupos, ha grabado más de 20 discos y tiene su propio programa de radio.

Mis primeros pasos con el himno fueron en solitario y en secreto, sin avisar a nadie, porque no estaba seguro de si iba a conseguir una propuesta mínimamente digna. En mis viajes a Barcelona me llevaba una libreta y en el AVE escribía letras e imaginaba posibles acordes. Deseché muchos textos hasta que un día di con el actual estribillo de la canción y atisbé un posible proyecto. Fue entonces cuando invoqué el espíritu de los Pat Moritas y comencé a trabajar con Carlos Prida y Nacho Palomares. Este último, además de músico, es técnico de sonido y tiene un estudio de grabación que nos acogió y dio forma a la primera maqueta. Un trabajo muy simple que, sin embargo, convenció al presidente y a los vicepresidentes del Consejo General de Enfermería, Máximo González Jurado, Pilar Fernández y Florentino Pérez Raya, que confiaron en la canción desde la primera vez que la escucharon.

A partir de entonces entró en escena el maestro Javier López de Guereña, un músico que ha hecho unos arreglos y le ha dado una orquestación maravillosa para que el himno pudiese ser interpretado con toda la solemnidad posible. El siguiente paso fue elegir quien lo interpretaba, para nosotros la mejor opción era una coral de profesionales sanitarios porque iban a ser capaces de cantar desde el alma, sintiendo cada estrofa que interpretaban. Hemos tenido muchísima suerte. Nos encontramos en el camino con la Coral del Hospital Vall d’Hebron que aceptó el reto y ha hecho un trabajo espectacular gracias a sus interpretes, que han sacrificado horas de sus familias para ensayar sin parar, y a su director, Pablo Bélez, que se ha dejado la vida en el proyecto. La guinda final ha sido contar con la soprano Elaine de Valero para hacer de solista. El resultado no puede ser mejor, la verdad es que jamás soñé con ver una canción mía interpretada y grabada con tantísima calidad.

Hace unos días me preguntaban en redes sociales donde había encontrado la inspiración y qué quería plasmar en el himno. Con esta canción he querido reflejar todo aquello que las enfermeras y enfermeros me han ido contando sobre la esencia de su profesión. De hecho cada palabra esta medida al milímetro y tiene su significado. Quizás lo más claro sea el mismo título, “Allí estaré”, que fue lo primero que escribí. Me gusta especialmente porque creo que define muy bien la realidad de la enfermería. Una profesión que está siempre al lado del paciente, para resolver cualquier problema, para ayudarle a sobrellevar cualquier adversidad.

Poder dar forma a este himno ha sido un privilegio enorme. Es una alegría comprobar que la enfermería se está identificando con nuestro trabajo y está contenta con el himno porque las visualizaciones de los videos en YouTube no paran de aumentar, en este momento esta a punto de llegar a 20.000. Además, ha sido precioso volver a crear música con mis amigos Carlos y Nacho y conocer a Javier López de Guereña, a Pablo Bélez, a Elaine de Valero y a todos los miembros de la Coral.

Estoy trabajando con la asesoría jurídica del Consejo General de Enfermería para ceder los derechos y que pueda ser interpretado por cualquier entidad enfermera del mundo de forma libre y gratuita. Este himno es mi regalo a una profesión que me ha muchísimo en este vida y mi intención ni es ni será nunca enriquecerme con él. No puedo estar más agradecido a la enfermería por todo lo que me ha dado en esta vida, en lo profesional y en lo personal, que también ha sido mucho.

Iñigo Lapetra

Autor Iñigo Lapetra

Como director de comunicación del Consejo General de Enfermería la vida me ha dado la oportunidad de beber de dos mundos apasionantes: la enfermería y el periodismo.

3 Comments

  1. María Sánchez

    el himno es delicioso. lo tengo de melodia en el movil y dejo que suene entero antes de responder las llamadas. hacia tiempo que no bailaba tanto. gracias gracias y gracias por este desinteresado regalo. lo unico que le echo en falta es alguna mencion en la letra a nuestro querido Presidente máximo. se lo merece. no entiendo porqué no sale.

  2. Patricia Martín

    Desde estas líneas quiero daros las gracias por la generosidad con la que nos habéis regalado esta preciosa canción que detalla perfectamente cómo somos las enfermeras y porque hemos elegido esta profesión

    La primera vez que escuché el himno no puedo evitar llorar y recordar aquellos momentos donde me he sentido especialmente orgullosa de ser enfermera. La primera persona que murió en mis brazos, el primero bebe que ayude a traer al mundo, la primera persona que salió de un coma….

    Me siento tremendamente identificado con cada palabra y no puedo creer que haya sido escrito por personas que no son de nuestra profesión. Algunas descripciones… que jamás imaginé que podría ser escritas por un no enfermero.

    La verdad es que no tenía ni idea de lo que se cuenta el comentario anterior, que minorías en redes sociales no están contentos con el himno y se meten con el. A ellos les pido simplemente que no lo escuchen y dejen de amargarnos a los demás, que nos dejen a nosotros disfrutar de él. Basta ya de destruir las cosas buenas que hace la gente porque esto es lo mismo que está ocurriendo con la donación de Amancio Ortega.

  3. Marilourdes de Torres Aured

    Enhorabuena Iñigo,

    Ya eras uno de nosotros desde el principio, pero ahora eres nuestro corazón y buen hacer profesional que se muestra al mundo con una poesía envolvente.

    Escucharlo en vivo, en directo, me arrasó los ojos y el corazón….. y con el último estribillo, las lágrimas fluyeron. ¡¡¡Qué bonito!!!

    Fue una noche mágica, una unión mágica dentro de un contexto mágico.

    Gracias por el himno. Gracias al CGE y al equipo de Comunicación por haber preparado tan bien, un Congreso tan redondo.

    Gracias

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