Enfermera con semblante serio con EPI puesto en hospital

Los problemas se agolpan a las puertas de Sanidad

Carolina Darias es una mujer con un talante excepcional. A diferencia de su antecesor en el cargo, Salvador Illa, que era hosco y mostraba verdadero pavor a reunirse con sanitarios de todo tipo y patronales, a la conciliadora ministra de Sanidad no le duelen prendas en pulsar en persona el estado de opinión de los principales representantes del sector.

Cierto es que ha empezado a hacerlo con los más dóciles, lo que explicaría su retraso en mantener un encuentro a fondo con la enfermería, muy crítica con la actuación socialista en Sanidad en lo que llevamos de mandato. Pero tiempo al tiempo. Todo se andará. De momento, la canaria va dando pasos que en el catalán parecían impensables. El carácter dialogante y hasta amigable de la titular de la cartera no está haciendo, sin embargo, que el Ministerio marche bien. Mejor que con Illa al frente sí que lo hace, desde luego, pero no termina de arrancar del todo. A medida que pasan los meses, los problemas se agolpan o aparecen otros inesperados que amenazan al Gobierno con derribar la imagen de la vuelta a la normalidad tras dos años de pandemia que trata con encono de trasladar a la opinión pública.

España va con retraso, por ejemplo, en la aprobación y administración de la cuarta dosis a los más mayores. Cerca de seis meses después de que se les inoculara la tercera, y ya con otra variante diferente del virus -Delta no es dominante-, la incidencia vuelve a crecer y los especialistas aventuran un próximo incremento de ingresos en planta, UCI y fallecimientos, a la vista de la evolución de los contagios.

España va retrasada, también, en la incorporación de las innovaciones terapéuticas, lo que equivale a decir que los pacientes se ven obligados a esperar meses para recibir fármacos que ya se dan en otros países por una mera cuestión de ahorro en el gasto. Medicamentos, por cierto, que aumentan la supervivencia o la calidad de vida en múltiples dolencias. ¿No teníamos acaso la mejor Sanidad del mundo?

Otro de los problemas con los que se está topando el Ministerio es con el malestar sanitario. Médicos, enfermeras, auxiliares y hasta farmacéuticos están muy descontentos con la actuación ministerial en temas como la elección telemática de plazas MIR, la falta de desarrollo de especialidades, las bajas retribuciones o la temporalidad de las contrataciones. Los aplausos de la primera ola han quedado en nada. Tampoco acierta Sanidad en su apelación a la Salud pública por la vía de las estrategias, los planes integrales y otros instrumentos de fácil venta mediática pero de escasas consecuencias prácticas. La referente a la salud cardiovascular ha terminado derivando en una bola de nieve mediática que ha golpeado las puertas del Ministerio.

PREGUNTAS CON RESPUESTA

-¿A quién se le cayó un póster encima en el Ministerio de Sanidad? ¿Por qué habló la persona afectada de “atentado” y amenazó con denunciar a este departamento?

-¿Qué persona beneficiada por el PSOE en el área sanitaria con un gran contrato inunda las redes sociales con proclamas contra el PP?

-¿Qué compañía aprovecha su vecindad con un conocido gerente de hospital para tratar de ganarle para su terreno?

-¿Qué alta directiva de una multinacional farmacéutica está de los nervios y paga su ira con sus subordinados? ¿Por qué?

Sergio Alonso

Autor Sergio Alonso

Fundador y director del suplemento A tu salud del diario LA RAZÓN

Leave a Comment